Bonito gesto de FAEMA con los municipios afectados por el fuego de la Paramera

Después de vivir como Ávila sufría un gravísimo incendio el pasado mes de agosto en diferentes localidades de la provincia, Faema manifestó que quería colaborar destinando 2.000 euros para la compra de árboles para las localidades de Riofrío, Villaviciosa, Robledillo, Sotalbo y Mengamuñoz. A esta iniciativa se unió la empresa Calderas Ávila aportando 500 euros, empresa que habitualmente es colaboradora de Faema.

"Hoy toca ser solidarios con estos pueblos y mostrar nuestro cariño a través de la donación de este mobiliario y que al menos recuerden algo bueno del sufrimiento que vivieron los vecinos", comenta Iñaki Fernández, gerente de Calderas Ávila. Fueron múltiples las muestras de solidaridad recibidas y en este tiempo en dichos pueblos se han producido reforestaciones por lo que esta necesidad casi un año después, ha quedado cubierta.

"Hablando con los ayuntamientos afectados se han valorado otro tipo de necesidades que tiene el municipio y es por ello que se decide hacer una donación que complemente espacios al aire libre donde los vecinos puedan pasar momentos de ocio como son los parques, merenderos o espacios lúdicos de la localidad", señala Inma Pose Directora, general de Faema.

Es por ello que se decide hacer la donación de cuatro mesas picnik para Villaviciosa, Robledillo, Sotalbo y Mengamuñoz y una papelera y un balancín para Riofrío. "Debido a la subida de precios generalizada, la compra de mobiliario ha requerido de una inversión mayor a lo que se planteó en un primer momento, pero aun así, Faema ha decidido seguir adelante y ha querido tener una muestra de cariño con estos pueblos", señala Inma Pose.

Compra mobiliario

La compra del mobiliario ha supuesto casi 3.200 euros de los cuales 2.700 los pone Faema y 500 Calderas Ávila. Son pueblos muy queridos para la entidad y se tiene mucha vinculación con ellos porque en numerosas ocasiones se han realizado actividades como el Desafío Solidario en Mengamuñoz, el Reto Solidario en el municipio de Solosancho  y actividades para niños y mayores en Riofrío y en Sotalbo.

Además, muchos de los trabajadores y usuarios de Faema tienen vinculación con estos pueblos: "Ojalá pudiéramos colaborar en más, pero con este gesto queremos dar nuestro apoyo y solidaridad a todos los vecinos de estas localidades. Que sientan que estuvimos con ellos, que su dolor fue el nuestro. Queremos transmitir un mensaje de esperanza, que juntos somos más fuertes y que estamos para apoyarnos. Pedimos a las diferentes Administraciones unidad para que todas colaboren y puedan estudiar estrategias en cuanto prevención de incendios y en la medida de lo posible estos sucesos no vuelvan a ocurrir".