El dispositivo para la extinción del incendio forestal de Cebreros desmovilizó a los efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) ante la evolución favorable del fuego, aunque permanece en nivel 2 desde el 17 de julio, según informó la Junta. No obstante, el trabajo continúa con numerosos medios terrestres, apoyados por una decena de medios aéreos, que practican descargas durante toda la jornada para refrescar los puntos calientes y evitar reproducciones.
En estos momentos, la localidad de El Hoyo de Pinares, cuyos vecinos fueron desalojados el lunes y tuvieron que pasar tres noches fuera de casa, está volviendo poco a poco a la normalidad. El delegado de la Junta en Ávila, José Francisco Hernández, explicó que han regresado unos mil vecinos y que de momento no hay suministro de agua potable, por lo que continuará llevando agua embotellada. Se estima que esta situación se prolongará durante unos siete días y ya se están haciendo análisis del agua.
Las carreteras AV-561 y AV-562, hasta ahora cortadas por el incendio, se reabren al tráfico, si bien la AV-502 se deja solo para que la usen los vecinos de El Hoyo de Pinares. El incendio se encuentra en rango de estabilización y sin llama viva y se está trabajando para asegurar el perímetro, que alcanza unos 50 kilómetros. Según detalló el delegado de la Junta la situación está tranquila y, aunque hay alguna reproducción dentro del perímetro, lo importante es que no salte al exterior.
La superficie afectada por el incendio que se declaró el pasado fin de semana en Cebreros ronda las 4.500 hectáreas. Es previsible que a lo largo de esta jornada se produzca la bajada de nivel y se desmovilicen efectivos.