El presidente provincial de ASAJA en Ávila, Joaquín Antonio Pino, junto a varios técnicos e ingenieros de la organización, han visitado a los ganaderos afectados por los incendios que están asolando nuevamente esta temporada la provincia de Ávila.
Pudieron contemplar in situ el desastre y conversar con los ganaderos afectados de las localidades de El Hoyo de Pinares y Cebreros, localidades donde los incendios han arrasado más de 4.000 hectáreas. Allí, la única ayuda que ha llegado hasta el momento ha sido poco más de una decena de camiones de paja fletados por la Diputación Provincial de Ávila, sin que hasta la fecha la Consejería de Agricultura -que es quien ostenta por mandato constitucional las competencias en materia de agricultura y ganadería- haya enviado la alimentación de urgencia que necesitan los afectados.
En concreto, la cabaña ganadera afectada de estas dos localidades precisa la disposición inmediata de forrajes, así como llevar a cabo una planificación para el suministro de agua y los necesarios abrevaderos que en breve se predicen necesarios, junto a un suministro estable y en función de las cabezas de ganado de cada explotación de paja y heno. Asimismo, se solicita a los ayuntamientos la condonación a los ganaderos del pago por aprovechamiento de pastos comunales por parte de los ayuntamientos. Además, han sido varias las parcelas de viñedo de la D.O. Cebreros afectadas.
Por otro lado, los servicios técnicos de ASAJA de Ávila y su presidente, pudieron contemplar los estragos que los incendios han provocado principalmente en el término municipal de San Juan de la Nava, y en menor superficie en El Barraco, con un área quemada de más de 500 hectáreas. Cabe recordar que estos dos municipios fueron también afectados el pasado año por pavoroso incendió que asoló la sierra de La Paramera que devastó más de 20.000 hectáreas.
Este incendió ha afectado un enclave donde el ganado pasta y pasa el invierno, y donde los ganaderos de vacuno tenían hecho su acopio mediante pilas de heno y forraje para esos momentos, alimentación que también se ha quemado. Una zona que también era aprovechada a diente mediante el pastoreo del ganado ovino del municipio, del poco que queda en la zona, y donde también ha sido afectada superficie de viñedos.
Vía de urgencia
El presidente de ASAJA de Ávila ha indicado que la ganadería no entiende de días ni vacaciones, y necesita cuidados y alimentación a diario, por lo que insta a la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural a ponerse manos a la obra y por la vía de urgencia haga unos primeros envíos de forraje y heno, sin olvidar la planificación del suministro de agua. Ahora es cuando más se necesita la ayuda y el acompañamiento a los ganaderos.
Además, ASAJA reclama al Servicio Territorial de Medio Ambiente y la Delegación de la Junta de Ávila en su conjunto el levantamiento del acotado de los pastos afectados que permita a los ganaderos el cobro de las ayudas de la PAC el próximo año, y que de una vez por todas se cumpla el compromiso de la Junta de Castilla y León con ASAJA de modificar el artículo 92 de la Ley de Montes de Castilla y León que "criminaliza injustamente al sector ganadero, una cuestión que debe ser prioritaria para el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, y que debe materializar de una vez por todas en las Cortes de Castilla y León".
Por último, Joaquín Antonio Pino reclamó ayudas directas para el sector agrario afectado por los incendios y una "implicación real" tanto del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación como del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, para que no ocurra lo que temporada pasada donde los afectados -ganaderos y agricultores- por el incendio de Navalacruz "no han recibido ningún apoyo por parte del Gobierno de España pese al despliegue mediático del que hizo gala el tras ser sofocado el incendio el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez".