La clausura de la exposición de la Guardia Civil sobre sus 178 años de historia sirvió para que este 'cuerpo' se reivindicase ante la sociedad y sobre todo reconociese a las víctimas de los atentados terroristas que ha sufrido a lo largo de su historia. Más de 7.000 personas visitaron la muestra durante los 17 días que ha permanecido en el Centro de Congresos Lienzo Norte de la capital.
En un sencillo y emotivo acto conducido por los responsables de comunicación del instituto armado en Ávila, Sandra Saucedo y Luis Ángel Horga, destacó la intervención del teniente coronel responsable de la Comandancia de Ávila, Gustavo Dorda. Y lo hizo por lo emotivo de sus palabras. No en vano y ya lo recordaba Saucedo, tras el colectivo civil "la Guardia Civil es la que más alto precio pagó" en su lucha contra el terrorismo. 243 agentes han sido asesinados por defender la libertad, cuantificaban.
Víctimas que dijo Dorda son las que hacen que muchos guardias civiles que están en activo hoy lo sean por ellos. Y a ellos se refirió haciendo repaso de lo que la exposición que entonces se cerraba había pretendido mostrar. Y eso es el pasado, el presente y el futuro del cuerpo.
Refiriéndose al pasado dijo que pese a los 178 años que tiene en su haber "sigue prestando el mismo servicio que cuando se creó" y ese servicio es el que presta al ciudadano; es presente, y así se está viendo, puesto que son muchos los ciudadanos que quieren opositar para pertenecer al cuerpo, o muchos los niños que han llegado a la exposición y disfrutado de ella; y es futuro, concluyó.
Y en ese punto se refirió a las víctimas del terrorismo pues, al fin y al cabo, "son ellas las que nos dan fuerza para seguir". En ese momento pidió que "no perdamos esa memoria" y menos aquellos que "somos víctimas del terrorismo". Por todo ello pidió un "minuto de aplausos estruendosos por nuestras víctimas del terrorismo".
Algo que secundó el numeroso público de forma sentida, prolongada y puesto en pie. Por su parte el subdelegado del Gobierno en Ávila, Fernando Galeano tomó la palabra poco tiempo antes de que la Unidad de Música de la Guardia Civil procediera a la clausura oficial del acto. De hecho era partidario de dejar fluir la música y los sentimientos en lugar de llenar los vacíos con palabras, máxime porque, aseguró veníamos de días pasados en los que se habían vertido "duras y gruesas manifestaciones de palabra". Por supuesto lo que sí hizo fue agradecer a toda la plantilla en Ávila su trabajo y dedicación, del mismo modo que a los profesionales que hicieron posible la exposición.
El acto de clausura sirvió también para agradecer a quienes hicieron posible la realización de la muestra y que pasan por el Ayuntamiento de Ávila, por el propio Lienzo Norte y por la Fundación Iberdrola de ahí que la Guardia Civil Civil tuviera un detalle con ellos. Para recogerlo, el alcalde de Ávila, Jesús Manuel Sánchez Cabrera, el gerente del centro de congresos, Gonzalo Súnico y por parte de la Fundación Iberdrola, Miguel Calvo Delgado. Para el alcalde fue "todo un honor" poder estar en la clausura y recibiendo el agradecimiento de la Guardia Civil y además se comprometió a estar en el futuro: "La Guardia Civil siempre puede contar con nosotros" aseguró en un breve discurso en el que quiso recordar a todos aquellos "que dieron su vida por defender la libertad".
Gonzalo Súnico estimó que las gracias las debía dar él por haber elegido la Guardia Civil el Lienzo para su exposición y por la implicación de los agentes en el buen desarrollo de la misma, al igual que el equipo del centro de congresos. Para terminar, Calvo Delgado consideró que la labor de la fundación no era más que la que tenía que ser pues "la sociedad debe implicarse en ayudar" (en este caso a la Guardia Civil).