Un nuevo centro de reproducción en el laboratorio existente a orillas del Lago de Sanabria, en Zamora, permitirá la cría de 50.000 mejillones de la especie Margaritifera margaritifera incluida en la categoría de "en peligro de extinción" del Catálogo Español de Especies Amenazadas, con declives del 90% en toda su área de distribución, según se anota desde la Junta de Castilla y León.
Este mejillón de río es "un bioindicador del buen estado de conservación de los ríos en los que aún pervive". Habita en el lecho de ríos con aguas puras, frías y muy oxigenadas.
Castilla y León alberga las poblaciones más meridionales conocidas de Margaritifera margaritifera, en peligro de extinción desde 2016. La mayor parte se concentran en el noroeste de Zamora, en los ríos Negro y Tera, existiendo otras poblaciones importantes en el río Águeda, en Salamanca; y en el río Alberche, en Ávila, considerándose recientemente extinguida en la cabecera del río Duero, en Soria.
El nuevo proyecto puesto en marcha por la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio para la náyade o mejillón de río en peligro de extinción contempla también actuaciones en Salamanca y Ávila con un importe total de 724.120 euros hasta 2025, con financiación de la Unión Europea en el marco del mecanismo de recuperación y resiliencia Next Generation EU.
En el laboratorio del Lago de Sanabria hace años que se vienen realizando distintas experiencias de cría para la puesta a punto de los procedimientos y técnicas oportunos.
El objetivo del centro es alcanzar una producción de unos 50.000 juveniles al año de Margaritifera margaritifera, para lo cual se contempla su dotación con estanques, enfriadores, filtros y demás infraestructuras necesarias, junto con la construcción de un pequeño vivero que permita el crecimiento de los juveniles hasta que adquieran un tamaño apropiado que permita su liberación al medio natural.
El proyecto también prevé la realización de actuaciones de mantenimiento y mejora de las infraestructuras destinadas a la producción de la trucha común de la línea genética Alto Tera del Centro Ictiogénico de la Junta de Castilla y León de Vegas del Condado (León), con el objetivo de fomentar las poblaciones naturales de trucha común y la propia suelta de juveniles de Margaritifera margaritifera, ya que los ejemplares de trucha a liberar portarían las larvas en sus branquias.
Estas dos medidas se complementarán con campañas de infestación de ejemplares de trucha silvestre, por lo que se plantea la utilización de equipos de pesca eléctrica para capturar unos 2.000 ejemplares de trucha al año que serían liberados en el mismo punto de captura.
Esta especie se caracteriza además porque para cerrar su complejo ciclo vital requiere de la presencia de la trucha común, ya que una de sus etapas se desarrolla en las branquias de estos salmónidos, donde experimentan una metamorfosis hasta que se liberan en forma de pequeñas náyades que vuelven al lecho de los ríos.
Estos requerimientos ecológicos tan específicos, junto con la paulatina degradación de su hábitat por diferentes causas (contaminación, alteración del régimen de caudales, degradación de márgenes, construcción de grandes presas o incendios, entre otras) ha hecho que sus poblaciones en todo su ámbito de distribución europeo se encuentren en serio declive, con una reducción estimada de alrededor del 90% de sus efectivos desde principios del siglo pasado, por lo que, en la actualidad, la mayor parte de sus poblaciones no son funcionales, ya que se encuentran envejecidas y sin reclutamiento de ejemplares jóvenes desde hace décadas.
Actuaciones en Zamora
El proyecto contempla la realización de algunas intervenciones orientadas a corregir algunos de los principales impactos que afectan a la especie y a su hospedador en el noroeste de Zamora, como la corrección de puntos de ingreso de sólidos en suspensión a los cursos de agua, el control de las poblaciones de cangrejo señal (cuya reciente introducción en aguas del río Negro parece estar afectando negativamente a la náyade), la limpieza y mejora de frezaderos y la adecuación y naturalización de caños para el alevinaje de la trucha común o la construcción de pequeñas presas sumergidas.
Todas estas actuaciones se complementarían con distintas labores de difusión y sensibilización ambiental por parte de la Junta de Castilla y León.
La inversión total ya aprobada por parte de la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio es de 527.447 euros a desarrollar entre los años 2023 y 2025.
Actuaciones en Salamanca
El objetivo principal de las actuaciones a desarrollar en la provincia de Salamanca es la localización de ejemplares vivos de Margaritifera margaritifera presentes en el río Águeda, para poder realizar una translocación de los individuos encontrados hasta tramos más altos del río, donde existan buenas poblaciones de trucha común, incrementando así la posibilidad de que los ejemplares de Margaritifera Margaritifera rescatados puedan completar su ciclo reproductivo, ya que actualmente no puede reproducirse en los tramos que ocupa.
Asimismo, se realizarán tanto campañas de infestación de alevines de truchas como el marcaje, estabulación y seguimiento mensual de los ejemplares traslocados a los tramos fluviales escogidos.
La inversión total aprobada por parte de la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio para esta provincia es de 46.673 euros a desarrollar entre los años 2023 y 2024.
Actuaciones en Ávila
En la provincia de Ávila se prevé el desarrollo de una serie de actuaciones encaminadas a mejorar la población existente en la cuenca del río Alberche. En concreto, se llevarán a cabo acciones con el fin de conseguir la infestación de truchas para favorecer la propagación natural de la especie, lo que comprenderá el rescate de truchas y náyades en el estiaje, el seguimiento de las campañas de infestación y la suelta de ejemplares criados en los canales.
Así mismo, se desarrollarán trabajos de mejora del hábitat de la náyade, como la limpieza de los frezaderos de truchas en los tramos de cabecera y de lechos de arena, controles selectivos de especies exóticas invasoras y correcciones de puntos negros de vertidos y derivaciones de agua no autorizadas.
La inversión total prevista por parte de la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio se sitúa sobre los 150.000 euros, a desarrollar entre los años 2023 y 2025, estando muy avanzanda la redacción del proyecto de ejecución, según se informa desde la Junta de Castilla y León.
