Ávila se mueve por el tratamiento de Andrea

Más de 2.000 personas han participado este viernes en la I Marcha Solidaria Policía Local de Ávila, organizada por este cuerpo para conseguir fondos para el tratamiento de dos menores, Andrea y Samuel, que padecen un meduloblastoma.

La marcha surgió, según ha explicado el agente David Aillo, a iniciativa de la plantilla de la Policía Local de Ávila, que decidió ayudar así a uno de sus compañeros, José Manuel Jiménez, 'Cuqui', cuya hija, Andrea, había sufrido una recaída de un tumor cerebral y para la cual la sanidad pública ya no ofrecía tratamiento.

A través de la asociación 'Óscar, contigo', Andrea consiguió la posibilidad de entrar en un tratamiento experimental realizado en una clínica privada y la cita pretendía contribuir a sufragar los gastos.

Aíllo, en declaraciones a los medios de comunicación, se ha mostrado sorprendido por la acogida de la iniciativa, ya que "teníamos previsiones de unas 200-400 personas y estamos cerca ya de las 2.000 inscripciones, los compañeros no dan a basto".

José Manuel Jiménez, padre de Andrea, ha explicado que "con la sanidad pública estábamos encantados porque le dieron a Andrea todo el tratamiento y la asistencia que necesitan estos niños, pero llega un momento que se acaban las posibilidades".

Este viernes 'Cuqui' estaba "abrumado" por la respuesta de los abulenses y solo podía "agradecer todo el apoyo y el movimiento que ha habido, de gente que te conoce y que no te conoce, porque hoy son mi hija y Samuel -que participará también en el tratamiento- pero ves otros niños a los que se les acaban las posibilidades y cualquier ayuda es de agradecer".

David Aíllo, en este sentido, señaló que "en Ávila hay muchos otros niños que sufren este tipo de problemas", por lo que anunció que la intención es que esta marcha solidaria permanezca en el tiempo y tenga continuidad "poniéndole cara, cada año, con un motivo distinto".

La marcha ha salido frente a la comisaría de Policía Local y ha tenido dos recorridos, de 2 y 5 kilómetros, tras la cual los participantes, de todas las edades, podían descansar y recuperarse con un avituallamiento preparado en la pista hípica San Segundo.