El grupo Por Ávila en la Diputación Provincial presentará en el Pleno que se celebrará el próximo lunes, 25 de septiembre, una moción para avanzar en la consecución de una provincia cardioprotegida.
Su portavoz, Óscar Jiménez, ha anunciado que se pedirá que se haga un estudio sobre la actual implantación de desfibriladores en la provincia, y que se apoye a través de una línea de subvenciones a aquellos ayuntamientos que no cuenten con ellos para que se instalen, y se forme a la ciudadanía en su utilización.
Según datos de la Sociedad Española de Cardiología, cada año se producen en España unas 35.000 paradas cardíacas. Y usar un desfibrilador de forma rápida tras el suceso aumenta exponencialmente las probabilidades de supervivencia.
Deibdo a ello, la formación política sigue apostando por que nuestra provincia sea una provincia cardioprotegida.
Para ello en la moción se demanda que se lleve a cabo un estudio de la actual implantación de desfibriladores externos semiautomáticos en los municipios, y que la Diputación colabore con los Ayuntamientos a través de una línea de subvenciones para que se instalen en aquellos municipios que aún no cuenten con ellos, y se incrementen en los que ya tienen alguno, ya que Ávila es la tercera provincia de la región con menor número de desfibriladores.
Según los datos del registro de desfibriladores de la Junta de Castilla y León, habría 34 localidades de Ávila que cuentan con DESAS en espacios físicos.
Pero quedarían amplias zonas de nuestra provincia por cubrir, y especialmente en los más pequeños municipios, que con sus recursos propios no tienen capacidad para hacer frente al coste de adquisición de estos aparatos y su mantenimiento.
Por eso se debería realizar una convocatoria de subvenciones para la adquisición e instalación de desfibriladores externos semiautomáticos y un curso de técnicas de uso, ya que es fundamental que se intensifique la formación a la ciudadanía, especialmente a los grupos de riesgo y primeros intervinientes, en el uso de desfibriladores, soporte vital básico y de reanimación cardiopulmonar.
Además, se pide que se lleve a cabo una revisión periódica de estos desfibriladores para que estén en condiciones óptimas de uso, facilitando la posibilidad de adherirse a un acuerdo marco, como están realizando otras diputaciones.