Magia este domingo con el musical 'Un hogar con Encanto'
Tendrá lugar este domingo, 24 de noviembre, en el Teatro Santo Tomás
Emilio de Justo puede narrar en primera persona la historia de un torero que ha llegado a la cima por méritos propios. A base de afición y una férrea disciplina, salió de una situación tan dura como irreversible para muchos que se visten de luces, y para cualquier mortal. Con la pasión desmedida con la que vive la profesión, logró situarse en figura del toreo. Si un toro no le parte el cuello en la encerrona de Madrid aquel 10 de abril de 2022, ahora no estaríamos hablando de figura, sino de figurón del toreo, pues hubiera sido aquella, la tarde de su consagración. Recuperado de la lesión que arrastra por las fracturas en la base del cráneo y en las vértebras C1 y C2; y anunciado en todas las grandes ferias, el extremeño afronta una temporada crucial en su trayectoria. De Justo, asume con ilusión los primeros compromisos de la temporada. Este fin de semana actuará el sábado en Almendralejo y el Domingo de Ramos, 24 de marzo, en Arenas de San Pedro, en un cartel que completan Juan Ortega y Roca Rey; una plaza en la que ha triunfado en otras ocasiones y a la que profesa un afecto especial.
¿Cómo recuerdas tu debut en Arenas de San Pedro?
Fue en 2021, toree con Morante de la Puebla y Diego Urdiales una corrida de Torrestrella. Tengo recuerdos muy bonitos porque corté tres orejas y me sorprendió la afluencia de público. Pese a que la plaza estaba en un momento complicado, acudió mucha gente. Percibí que había muy buenos aficionados, me sorprendió de forma positiva. Me ilusiona que Arenas de San Pedro vuelva a disfrutar con mi toreo.
¿Y la última actuación en la localidad?
El año pasado en primavera con la corrida de Garcigrande. También corté tres orejas y cuajé un toro muy bueno, tuve sensaciones extraordinarias. Las dos veces que he toreado en Arenas, han sido dos tardes triunfales que recuerdo con cariño.
¿Cuál ha sido la evolución de Emilio de Justo desde que toreaste la primera vez en Arenas hasta ahora?
En el transcurso de estos dos años, imagínate por todas las ferias relevantes que he pasado, he tenido triunfos muy importantes en Madrid y Sevilla, he debutado en plazas como Málaga, Zaragoza, Bilbao, etc. He ganado en experiencia, adquirido poso… Siento que he crecido y madurado como torero. Espero que en Arenas vean mi progreso, ese punto de más que quiero mostrar esta temporada y que disfruten de una gran tarde.
¿En qué momento estás y con qué sensaciones afrontas la temporada 2024?
Me encuentro en un momento muy bueno, tengo mucha ilusión y sobre todo ganas de expresar cosas que llevo dentro y voy a sacar este año. Creo que los aficionados se van a sorprender al ver lo que todavía no han visto de mí. Los toreros tenemos la obligación de triunfar para no quedarnos atrás, pero este año, aparte de salir a triunfar, quiero mostrar mi madurez y la evolución que estoy experimentando en mi concepto para torear cada vez más despacio, estar cada vez más relajado… Quiero dar un paso más en mi expresión torera.
¿Cómo te encuentras de tu grave lesión en el cuello?
Estoy muy recuperado. El año pasado fue difícil para mi porque tenía muchos dolores y falta de flexibilidad en el cuello. Ahora, he ganado movilidad, se me ve más suelto, ya no se me nota tanto y eso a nivel psicológico me ha influido de manera positiva. Me encuentro bien, tanto física como mentalmente.
Si consultamos las estadísticas, resulta Garcigrande una de tus ganaderías talismán…
Desde que debuté con la ganadería de Garcigrande en la feria de Cáceres del 2009, hasta la actualidad, cuando me he anunciado con ella me ha permitido triunfar rotundamente. Todas las tardes que he matado Garcigrande he cuajado toros y he abierto la puerta grande. Es una ganadería que me encanta, tiene un fondo de bravura y de clase extraordinario, exige muchísimo, tiene la dificultad de ser encastada, pero a mi toreo le va muy bien. Tanto el cartel como la ganadería creo que reúne todos los alicientes para que vivamos una gran tarde de toros el domingo.