Castilla y León registró en el primer trimestre del año una reducción del número de desempleados de apenas el 0,54 por ciento, con 600 parados menos en comparación con el mismo periodo de 2023, lo que deja la cifra total de desempleados en 114.500 personas. Esta rebaja contrasta con el dato nacional, ya que el descenso fue del 6,54 por ciento, con 208.400 personas menos, hasta los 2,97 millones de parados, según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) publicada hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y recogida por la Agencia Ical.
Igualmente, el desempleo creció un 6,48 por ciento en relación al cuarto trimestre de 2023 en Castilla y León, al sumar 7.000 parados más, mientras en el conjunto del país, el aumento fue del 4,09 por ciento, con 117.000 trabajadores más sin empleo. Con estas cifras, la tasa de paro en la Comunidad, la séptima más baja del país, cerró 2023 en el 10,26 por ciento, 2,03 puntos por debajo del 12,29 por ciento de España y ocho décimas por encima de la anotada por la autonomía hace un año, que fue del 10,34 por ciento.
Por comunidades, el desempleo se redujo respecto al primer trimestre de 2023 en todas las comunidades, excepto en el País Vasco, que anotó una subida del 0,8 por ciento, seguida por La Rioja (1,2 por ciento), Ceuta (0,4 por ciento) y Melilla (1,8 por ciento). En cuanto al cierre de 2023, el paro creció en 13 comunidades, entre ellas Castilla y León.
Por lo que respecta a la evolución interanual del paro, se mantuvo en Segovia (5.500 desempleados) y creció en cinco provincias de la Comunidad, encabezas por Salamanca, con un aumento del 15,63 por ciento y 2.500 más, hasta los 18.500. Le siguió Valladolid, con un incremento del 12,76 por ciento y 3.100 parados más, hasta los 27.400 y Zamora, con una subida del 12,5 por ciento y 10.400 más, hasta los 11.700. Menores fueron los crecimientos del desempleo en Burgos, con un 3,57 por ciento más y 500 parados más, hasta los 14.500, y Ávila, con un 1,05 por ciento más y 100 parados mas, hasta los 9.600.
En el lado opuesto, el paro se redujo respecto al primer trimestre de 2023 en tres provincias, sobre todo en Palencia, donde descendió un 31,03 por ciento, con 2.700 desempleados menos, lo que deja el cómputo total en 6.000, y en León, con una disminución del 24,09 por ciento, con 5.300 menos, hasta los 16.700. También descendió un 2,17 por ciento, con 100 desempleados menos en Soria, hasta los 4.500.
Con ello, la tasa de paro subió en Ávila del 12,85 al 13,61 por ciento; en Burgos, del 8,02 al 8,24; en Salamanca, del 10,51 al 12,44; en Valladolid, del 9,84 al 10,56 y en Zamora, del 14,33 al 15,35. Por el contrario, se redujo del once al 8,96 por ciento; en Palencia, del 11,76 al 8,11; en Segovia, del 7,32 al 6,93, y en Soria, del 10,89 al 10,07.
Por su parte, el número de activos creció en cinco provincias, con aumentos del 0,51 por ciento en Burgos, hasta los 175.700; un 0,54 por ciento en Palencia, hasta los 74.400; un 5,15 por ciento en Segovia, hasta los 79.600; un 6,15 por ciento en Soria, hasta los 44.900; un 4,85 por ciento en Valladolid, hasta los 259.400, y un 5,09 por ciento en Zamora, hasta los 76.400.
Finalmente, en relación a los ocupados disminuyeron en Ávila un 5,27 por ciento, hasta los 61.100; en León un 4,56 por ciento, hasta los 169.500 y en Salamanca, un 4,47 por ciento, hasta los 130.300. Por el contrario, crecieron un 0,25 por ciento en Burgos, hasta los 161.200; un 4,59 por ciento en Palencia, hasta los 68.300; un 5,56 por ciento en Segovia, hasta los 74.100; un 6,9 por ciento en Soria, hasta los 40.300; un 3,99 por ciento en Valladolid, hasta los 232.000, y un 3,85 por ciento en Zamora, hasta los 64.700.
