Cruz Roja en Ávila acogió a 208 personas refugiadas en 2023 y en los meses trascurridos de este año ya se han atendido 119 personas en las diferentes fases del programa de la organización humanitaria.
Por la fase de Valoración y Derivación, en la que Cruz Roja en Ávila cuenta con 15 plazas, han pasado un total de 49 personas; por la de Acogida Temporal, han pasado 49 personas, ya que la organización cuenta con 39 plazas; y por la de Intervención Social, han pasado 24 personas, 12 de cuales aún continúan siendo atendidas en esta fase. Algunas de estas personas han pasado de una fase a otra.
De todas estas personas que están siendo atendidas en este 2024 por Cruz Roja en Ávila y su provincia, destacan las nacionalidades de procedencia de Colombia con 37 personas, Ucrania con 30 personas y Venezuela con 27 personas. En este momento están siendo atendidas en las diferentes fases 11 personas de nacionalidad ucraniana.
En 2023, España registró 163.220 solicitudes de protección internacional, un récord histórico, que ya superaba en octubre el máximo histórico de 118.842 solicitudes alcanzado en 2022 y que la sitúa como tercer país europeo con más solicitudes, sólo por detrás de Alemania y Francia. Estos números mantienen la tendencia al alza iniciada hace años, sólo interrumpida por los efectos de la pandemia de Covid-19.
La mayoría de las personas solicitantes provienen de países latinoamericanos. Son personas que huyeron de la emergencia humanitaria en Venezuela, la violencia y el conflicto inacabado de Colombia y las violaciones de derechos humanos y persecuciones en Perú y Honduras. Más de 86.000 son hombres y 77.678 personas de entre 18 y 34 años. Cruz Roja Española acogió en 2023 a 51.180 personas refugiadas y solicitantes de asilo en distintos recursos de alojamiento.
Plan de empleo
Cruz Roja Española atendió a 5.878 personas en su Plan de Empleo, con una inserción laboral del 32% de los participantes. Cruz Roja en Ávila atendió el 2023 en el Plan de Empleo a 61 personas refugiadas, de las cuales 13 lograron insertarse en el mercado laboral y 24 fueron cualificadas para mejorar su empleabilidad. Este año 2024 continúa desarrollándose este programa. De hecho, los participantes acudieron al II Encuentro Empresarial 'Oportunidades de empleo en el entorno rural', que se celebró el 18 de junio en el Parador de Gredos.
La inserción laboral para una persona refugiada significa el acceso a un empleo digno y estable en el país de acogida, lo que tiene un impacto profundo y positivo en su autonomía económica, su integración social, su desarrollo profesional y personal, su estabilidad y seguridad, dignidad y confianza, y, en definitiva, la reconstrucción de su vida después de la experiencia de huir de su país.
El empleo ayuda a dejar atrás el pasado traumático y mirar hacia adelante con esperanza. Sin embargo, llegar a este momento vital conlleva un proceso largo de orientación, capacitación, formación, homologación de títulos o búsqueda de empleo, sin olvidar procesos vitales como el aprendizaje del idioma, encontrar una residencia estable o forjar redes sociales. En todos estos procesos, los acompaña Cruz Roja, que no solo proporciona ayuda material, sino que también potencia la autonomía y dignidad de los y las solicitantes de protección.