La Guardia Civil de Ávila ha investigado este lunes al que pudiera ser el autor de varios incendios forestales ocurridos el 27 de agosto pasado en la zona de Santa María del Tiétar y en Rozas de Puerto Real, cerca de Navahondilla. A las 19:33 horas, al tener conocimiento la Central Operativa C.O.C. de esta Comandancia de Ávila, que en las inmediaciones de la localidad abulense de Santa María del Tiétar, se produjo un incendio forestal, se trasladaron a la zona que estaba siendo afectada patrullas en servicio de la Guardia Civil, así como medios de extinción (aéreos y terrestres), ya que el fuego estaba afectando a monte bajo y masa arbórea, así como a fincas particulares, habiéndose iniciado junto a la Cañada Real, en el término municipal de Sotillo de La Adrada, y a escasos 100 metros del Monasterio de la Conversión.
Se incorporó al dispositivo componentes de Equipo de Investigación del SEPRONA de la Comandancia de Ávila, para iniciar la determinación de las causas que pudieran haber provocado el incendio y tomar constancia de las primeras evidencias que pudieran encontrar en el lugar. Finalmente, gracias a la rápida actuación de los medios de extinción participantes, el fuego fue controlado tras haber afectado a una superficie de 2,6 hectáreas.
Los componentes de SEPRONA iniciaron diligencias de investigación policial para el esclarecimiento de los hechos, abriendo la Operación SOTIETAR efectuando lectura de los vestigios dejados por el fuego, en los objetos que encontraban en su avance, pudiendo reconstruir la evolución y dirección del avance del incendio, determinando las distintas trayectorias del fuego, mediante el 'Método de las Evidencias Físicas', localizando la zona de inicio junto a la Cañada Real.
Llegando a esta determinación tras el estudio de la geometría del incendio, así como determinando las condiciones de humedad del combustible muerto y seco, el cual era muy propicio para la propagación del incendio. De los primeros análisis los investigadores se deducen que la intencionalidad de los mismos.
Se dio la circunstancia, del inicio de otro incendio forestal, en este caso en el término municipal de la localidad madrileña de Rozas de Puerto Real y que se inició unos 5 minutos antes que el de Santa María del Tiétar. En las primeras actuaciones fue fundamental la labor de un miembro de la Patrulla de Seprona de Cebreros, que a pesar de encontrarse fuera de servicio acudió inmediatamente, pudiendo recabar las primeras pruebas indiciarias fundamentales para la resolución posterior del hecho.
Las investigaciones, en las que se utilizaron medios técnicos, se pudo determinar la ubicación en la zona de los incendios de un vehículo con unas características singulares, cuyo propietario resultó ser un vecino de la localidad de Sotillo de la Adrada y voluntario en Protección Civil de este municipio abulense como bombero voluntario. Dicho individuo, ante los primeros interrogatorios, en un principio no reconoció la autoría de los incendios, contradiciendo las testificales de los testigos, pero tras las evidencias encontradas, y los informes técnicos elaborados por los agentes de SEPRONA, fue finalmente investigado por los presuntos delitos de incendio forestal, por la provocación de los incendios forestales, motivando la misma con su intención de poder acudir a los mismos a apagarlos con sus compañeros de Protección Civil y sentirse útil en dicha asociación de voluntarios.
Peligro alto incendios
Ha quedado constatado que los incendios han sido causados en época de peligro alto de incendios forestales, con el consiguiente riesgo de afección a las poblaciones cercanas, debido a su proximidad y fácil propagación a las masas forestales de los parajes afectados por el fuego. Las actuaciones, investigación y determinación de la autoría de estos incendios ha contado con la dificultad añadida de que el autor de los mismos adoptó y comenzó a tomar ciertas medidas o comportamientos para evitar ser captado por sistemas de vigilancia o la propia presencia de componentes de la Guardia Civil, alterando su rutina de desplazamientos con su vehículo para intentar no ser detectado a determinadas horas y días en las inmediaciones de los lugares donde se incendiaba el monte, unido todo ello al perfecto conocimiento de esta persona sobre los accesos a parajes, caminos y carreteras de la localidad por ser residente en la zona afectada.
La Operación SOTIETAR ha sido desarrollada por componentes del Equipo de Investigación del Servicio de Protección a la Naturaleza de la Guardia Civil (SEPRONA) de Ávila. Se ha contado con la fundamental colaboración de Agentes Medioambientales de la Comunidad de Madrid.
Las diligencias se encuentran en el Decanato de los Juzgados de Primera Instancia de Arenas de San Pedro (Ávila) y en la Fiscalía Provincial de Medio Ambiente y Urbanismo de Ávila, así como en Decanato de los Juzgados de Primera Instancia de Navalcarnero (Madrid) y en la Fiscalía Provincial de Medio Ambiente y Urbanismo de Madrid.