El sindicato agrario UPA Ávila ha reiterado su denuncia, a través de un comunicado, de "retrasos injustificables" desde mediados de junio en el pago de los daños por ataques de lobos en la provincia de Ávila.
Debido a ello, inciden en "el malestar" de los ganaderos abulenses "sigue incrementándose debido a la gestión del lobo" por parte de la Junta de Castilla y León, y en concreto del máximo responsable de Medio Ambiente, el consejero Juan Carlos Suárez-Quiñones.
UPA Ávila declara que la Administración regional "no ha pagado aún determinados expedientes por ataques de lobos en la provincia de Ávila desde mediados de junio, lo que indigna al sector productor aún más, que comprueba cómo sigue siendo víctima, no solamente de cada vez una mayor cantidad de cánidos en nuestro territorio, sino también del retraso del gobierno autonómico en indemnizar los daños".
Por ello, desd el sindicato agrario exigen a la Consejería de Medio Ambiente que "haga previsión de importes para que se vayan pagando todos los siniestros y no suceda como en años anteriores, cuando los siniestros del segundo semestre del año se han abonado hasta con doce meses de retraso utilizando la excusa de la aprobación de los presupuestos".
Además, advierten del "nivel de hartazgo y enfado" entre los ganaderos abulenses "se incrementa día a día porque tal y como denunciamos este pasado verano siguen produciéndose actuaciones controvertidas de determinados agentes medioambientales".
"Y todo porque siguen negándose a reconocer que las muertes de determinados animales están provocadas por la acción de los lobos, cuando las pruebas son evidentes y compatibles sobre terneros ya muertos, aunque sean los buitres los que posteriormente acaban con los restos de esos cadáveres", recalcan.
En cualquier caso, UPA Ávila califica como "lamentable" e "injustificable" que la Junta de Castilla y León, a través de la actuación de determinados agentes medioambientales, esté utilizando "excusas de mal pagador" para no indemnizar muchos de los ataques de lobos que se siguen produciendo en la provincia abulense.
UPA Ávila ha denunciado ante la Junta de Castilla y León en "infinidad de ocasiones" que no se puede calificar de "indeterminados" a los causantes de las muertes de cabezas de ganado en la provincia cuando las pruebas son "evidentes y si se obra de buena fe son capaces de obtenerse a simple vista".
La organización recuerda que en los últimos veinte días, en el término municipal de San Miguel de Serrezuela y en la zona de Piedrahíta, en apenas seis kilómetros de extensión de terreno, se han producido al menos seis siniestros con la muerte de varios terneros.
Estos datos se suman a la terrible cuenta que lleva a sus espaldas el sector ganadero abulense con 1.436 ataques contabilizados en el año 2023, y 1.652 cabezas muertas a lo largo del pasado ejercicio.
UPA Ávila hace un nuevo llamamiento al consejero de Medio Ambiente, Suárez-Quiñones, para que como máximo responsable demuestre "sensibilidad con la provincia de Ávila y se ponga en la piel de los ganaderos abulenses".
"La situación es ya de por si lo suficientemente insoportable por la presión que sufren a todos los niveles los afectados con la pérdida continua de animales como para que, además, sean víctimas de la errática gestión de indemnizaciones que les corresponden a los afectados", zanjan.
