1.969 contenedores, 150 medos mecánicos y 120 trabajadores. Estos son algunos de los datos que incluye el nuevo servicio de contenerización, recogida y transporte de residuos sólidos urbanos y de limpieza viaria en la ciudad amurallada y sus barrios anexionados, cuya implantación ya ha comenzado el Ayuntamiento de Ávila con la instalación y recogida de residuos en los nuevos contenedores, entre los que se incluye el de color marrón, para restos orgánicos.
En la mañana de este miércoles, el alcalde de Ávila, Jesús Manuel Sánchez Cabrera, acompañado, entre otros, por Javier Rivas, director de Zona de FCC, y Antonio Rodríguez, director de la Delegación Centro de FCC Medio Ambiente, entidad adjudicataria del servicio durante un periodo de diez años, ha presentado los primeros medios que se implantan con el desarrollo de un nuevo servicio "mejorado", que implicará una inversión de diez millones de euros en medios materiales.
El Ayuntamiento de Ávila pone en marcha este servicio, que supone una inversión municipal de ocho millones de euros anuales y la implantación progresiva de cerca de 150 medios mecánicos, entre barredoras (una de ellas, eléctrica cine por cien), camiones, desbrozadoras o furgonetas, cuya implantación se prevé esté en su totalidad en mayo de 2025, "antes del plazo de un año del que dispone la empresa concesionaria según el pliego", tal y como explicado Sánchez Cabrera.
El nuevo servicio supondrá un incremento de la plantilla del diez por ciento, hasta las 120 personas, lo que "supondrá una mejora en las calles de la ciudad, van estar más limpias", ha destacado Sánchez Cabrera. Este servicio implica también la renovación de contenedores, incluyendo la implantación del contenedor marrón o de residuos orgánicos, de modo que ya se están sustituyendo todos los contenedores actuales por otros de mayor capacidad que, por lo tanto, permiten ganar en volumen de contenerizació, se pasa de 800 a 3.200 litros por contenedor, y, a la vez, reducir la presencia global de estos elementos en las calles de la capital abulense, por lo que el alcalde de Ávila ha pedido a los abulenses que "hagan un esfuerzo si nos les pillan un poco más retirados".
"No obstante, van a estar a una distancia prudencial, nadie va tener que recorrer dos kilómetors con las bolsas de basura", ha dicho Sánchez Cabrera, tras apuntar que "a todos nos va costar adaptarnos, los cambios siempre son difíciles, pero es algo bueno y positivo para mejorar la calidad de vida en la ciudad".
Una vez culmine la implantación progresiva del servicio, "supondrá una mejora cualitativa con respecto al actual", ya que permitirá reciclar, con el contenedor marrón, los restos orgánicos o biorresiduos. Habrá, así, 5 contenedores: restos (negro), orgánico (marrón), papel y cartón (azul), envases (amarillo) y verde (vidrio), cuya recogida continuará realizando Ecovidrio.
"Llevamos desde el año 86 recogiendo la basura y limpiando las calles de Ávila y este contrato es el colofón de la apuesta que la empresa ha hecho por los abulenses y su Corporación", ha destacado Antonio Rodríguez, tras apuntar que "la renovación de la maquinaria es completa, algo que los abulenses lo van a notar rápidamente".
La implantación de los nuevos contenedores ha comenzado en las zonas de periferia, río Chico, barrio de la Universidad, barrios anexionados y polígonos, y se extenderá progresivamente al conjunto de la ciudad de Ávila, de modo que se prevé que los 1.968 nuevos contenedores, antes eran 3.011, estén instalados en el inicio del nuevo año, incluidos los soterrados del casco histórico, que se adaptarán a la nueva normativa, implantando el contendor para restos orgánicos, y que en mayo de 2025 ya estén todos los medios materiales funcionando.
El alcalde de Ávila ha incidido en que esta implantación permite avanzar hacia una "ciudad más moderna y sostenible", por lo que también ha realizado un llamamiento a la colaboración ciudadana, de cara a la separación de residuos.
En este sentido, se desarrollarán varias campañas informativas dirigidas a la población abulense que, por un lado, se centrarán en la concienciación ciudadana, con la implantación del nuevo contenedor y la necesidad de separar residuos para su reciclaje y, por otro, para llegar a los más jóvenes, en colegios y centros escolares, de cara a sensibilizar a la sociedad desde edades tempranas.
Ambas campañas estarán financiadas con fondos europeos, canalizados bien a través del Gobierno de España bien a través de la Junta de Castilla y León.
